
Carla Lacorte no resistió los gritos de enojo de su madre y dejó que se le cayeran las lágrimas que tenía contenidas. Acababa de escuchar la condena a seis años y medio de cárcel para el policía que la dejó paralítica al balearla mientras perseguía a ladrones, en junio de 2001.
La joven estudiante de veterinaria dijo que sentía “entre bronca y alivio” por la condena que le impuso el Tribunal Oral N°5 de Quilmes al ex agente José Ignacio Salmo, por el delito de lesiones gravísimas. La fiscalía había pedido 8 y la querella, 13 años de prisión.
Tras la lectura del fallo, los jueces ordenaron la detención inmediata del ex policía, que había llegado libre al juicio.
En 2004, otro tribunal de Quilmes lo había absuelto, pero tras una apelación la Cámara de Casación consideró que debía ser condenado y ordenó que un nuevo tribunal impusiera la pena.
“Salmo siempre quiso hacer creer que yo era la campana de unos ladrones que él perseguía. Tiró a matar y después quiso lograr su impunidad. El tema es que cada 48 horas hay un pibe muerto por gatillo fácil y eso no puede pasar más en este país. Esta lucha y esta condena no es sólo por mí, sino para que no haya más casos, para que la Policía no le arruine la vida a nadie más”, dijo Carla.
esta entidad es la vergüenza nacional, Liliana Cerviño, mamá de Damián Rosende, víctima de gatillo fácil de prefectura en el 2003
ResponderEliminarLamentablemente Sra No podemos agradecer vuestro comentario, solamente destacamos que podríamos perfectamente quitar el mismo de nuestro blog sin embargo lo dejamos, porque realmente no tenemos de que avergonzarnos estamos orgullosos de lo que hacemos y orgullosos de pertenecer a las filas de una noble institución como la Policía de la Provincia de Buenos Aires.-
ResponderEliminarAtentamente
Consejo directivo de UPOFI